El día era un día horrible de invierno y de lluvia, y el motivo de la marcha tampoco era más alegre que el día: recordar a un compañero de la bici que perdió la vida en la carretera. Pero muchísima gente salió a las calles y carreteras entre Bueu y Marín, y se detuvieron en el fatídico lugar del accidente, para honrar a Cristóbal y para guardar un minuto y medio de silencio, para recordar que hay que guardar un metro y medio al adelantar a un ciclista, para pedir respeto, para que no haya más familias que tengan que acudir a un acto como este, que no haya más clubes que pierdan a un compañero en la carretera, para que todas las marchas ciclistas sean una celebración, no un homenaje.
Esta fue la ruta que hicimos desde Bueu, hasta Marín y de regreso:
Vídeo en las noticias de la televisión de Galicia:
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